Corazón Roto



La tentación podría estar tan cerca de nosotras y nosotras tan mareadas por el perfume que simplemente no podemos luchar. ¿Cuál es la estrategia? ¿Qué se hace en esos casos? 

¿Huir? ¿Confesarnos? ¿Disimular a duras penas? ¿Cambiar de trabajo? ¿Mudarse?
Si el "enemigo" está tan cerca y lo que sientes sospechas que es correspondido....entonces...no no no...no te lances.

Te rompen el corazón, te lo pisan, lo sacrifican al llanto nocturno hasta que quedes seca. Sufres tú y sufro yo, sufre el resto y nuevamente se repite. ¿Cuándo termina? ¿Cuando desaparece? ¿Cómo se arranca ese pedazo de carne que no late si no te tiene cerca? ¿Cómo hago para arrancar de la memoria esos dulces besos sabor a chocolate?

Desaparece, huye, no finjas ser fuerte, cierra la puerta y patéala a golpes hasta que las heridas no te dejen caminar más. Piérdete en un bosque, medita, suplica, ora.

Se siente tanta rabia, tanta impotencia, quisieras tenerlo enfrente, caminar un desierto junto a él....¡interminable!

¡Carajo! ¿Cómo te explico con dos frases que quiero que no existas? Si mi sentimiento de culpa matara estuvieses enterrándome.

No llamas, no dices nada, mudo, indiferente, cruel, ¡maligno!
¡Te odio¡ Me odio por quererte, me odio por dejarte entrar, y perdí la llave de la puerta y me encerré contigo en un círculo vicioso..pero tú escapaste. Mis lágrimas, las tuyas, tan saladas, tan sinceras, tan vanas.

Ya no llores TONTA. Repite dos palabras simples: PUNTO FINAL.






Comentarios

Entradas populares de este blog

Bañarse en mantequilla

Solita

Reinventando